Ante la automatización derivada de la adopción de la IA en las empresas, el reto para los líderes no radica en la adopción de tecnologías, sino en hacerlo de manera estratégica y alineada con los objetivos organizacionales, de acuerdo con Codifin, empresa especializada en potenciar el talento con tecnología.

En este sentido, recalcó que el verdadero diferenciador será la capacidad de los líderes para utilizar la IA de manera estratégica, ética y centrada en el desarrollo humano, en un contexto en el que 16 millones de empleos en México están expuestos a la automatización a corto plazo, cifra que aumentaría a 26 millones en la próxima década, según el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) del 2024.

Por ello, habilidades cómo el liderazgo transformacional, la adaptabilidad y el pensamiento estratégico serán esenciales para guiar a los equipos a través del cambio, asegurando que la IA potencie las capacidades. Y cinco formas de integrarse son:

Personalizar la experiencia del cliente: Al analizar el comportamiento y las preferencias de los usuarios, las empresas pueden diseñar campañas de marketing más efectivas, mejorar la satisfacción del cliente y aumentar la fidelización. Esta personalización se traduce en una ventaja competitiva difícil de igualar.

Asegurar un uso ético y responsable: Para construir confianza externa e interna, deben crearse marcos éticos, auditar los algoritmos y asegurar la transparencia en el uso de datos. Además, la participación de diversas partes interesadas en la gobernanza puede asegurar un enfoque inclusivo y sostenible.

Impulsar y capacitar al talento: Desarrollar programas de capacitación en IA, pensamiento crítico y habilidades interpersonales pueden ser clave para preparar a los colaboradores ante los desafíos y oportunidades de la digitalización.

Impulsar la automatización inteligente: Automatizar procesos como la captura de datos, la generación de reportes y la gestión de archivos, por mencionar algunas, mediante IA permite a los colaboradores enfocarse en actividades de mayor valor agregado. Con ello, quedaría más tiempo para la creatividad, la innovación y la resolución de problemas complejos. Esta estrategia no solo incrementa la eficiencia operativa, sino que también contribuye a la satisfacción y retención del talento.

Tomar decisiones basadas en datos: Las herramientas de análisis predictivo y big data ayudan a estudiar grandes volúmenes de información, lo que permite a los líderes identificar tendencias, anticipar riesgos y descubrir oportunidades de negocio, transformando la intuición en estrategias respaldadas por evidencia.

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