Los líderes de las empresas tienen la enorme presión de priorizar las necesidades de su gente no solamente porque esto asegura un alto rendimiento, sino que permite a cada uno de los miembros de la empresa alcanzar su máximo potencial; la prioridad también debe ser de uno como individuo.

Por ello, TotalPass, el beneficio corporativo que ofrece la red de gimnasios, recientemente abrió TotalMind un apartado enfocado en el bienestar mental con ayuda de apps aliadas como Zen, la cual brinda meditaciones guiadas, además de la opción de personalizar objetivos en caso de padecer insomnio y ansiedad.

“Habrán días con tiempo y energía suficiente para poder realizar alguna actividad que te distraiga del trabajo y las presiones, habrá otros en los que apenas tengas energía de reserva, para esos días TotalMind, es la opción perfecta. Recuerda que tú eres el único que existe. Tómate el tiempo necesario para centrarte en tu bienestar y dedícate a cuidarte”, añade la firma de bienestar.

Si bien la salud mental, es una situación que afecta a las organizaciones y por consecuencia en el rendimiento de éstas, el punto de partida para contraatacar esta situación empieza en uno como individuo. Teresa Smith, Gerente Senior del grupo de asesoramiento estratégico de HCM en UKG comparte tres cosas que pueden ayudar:

1. Ser consciente del autocuidado: El autocuidado puede abordarse diferente para cada persona, pero cuando uno es consciente de pensamientos, sentimientos, comportamientos y emociones se pueden tomar medidas para gestionar los impactos. Cuidar activamente de uno mismo puede reducir los síntomas negativos de la salud mental y tener un efecto positivo en el bienestar general. Llevar un diario, realizar actividades físicas, los ejercicios de respiración, el cuidado del cuerpo con alimentación saludable y descanso, aprender algo nuevo, leer un libro o empezar un proyecto son algunas prácticas más comunes que ayudan al autocuidado.

2. Ofrecer gracia: Está bien no estar bien, pero lo importante es aprender qué hacer cuando te sientes así, para poder minimizar las emociones negativas. Lo mismo ocurre con los demás. No siempre podemos saber con qué están lidiando los demás en sus vidas personales y profesionales o por qué pueden estar actuando de cierta manera. Ofrecer gracia y amabilidad puede contribuir en gran medida a alimentar el bienestar propio y el de tus relaciones.

3. Establecer límites: Establecer límites es importante para el propio bienestar y el de los que te rodean. Sin límites saludables, puedes sentirte infravalorado, no apreciado o dado por sentado, provocando desgaste, estrés y agotamiento. Aquí algunos ejemplos de límites saludables:

• Tener claridad de lo que quieres y necesitas.
• Conocer tus prioridades y límites.
• Comunicar claramente tus deseos, necesidades, prioridades y límites.
• No pedir disculpas por querer satisfacer tus necesidades.
• Ser coherente con tus límites.

Establecer límites saludables, definirlos y principalmente comunicarlos en tu vida personal y laboral, ofrece tranquilidad, y con ello el tiempo y energía para centrarte en las cosas que realmente importan, como tu bienestar.

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