Una cultura mal gestionada reduce la retención, debilita la productividad y pone en riesgo la reputación interna de la empresa.
Las nuevas demandas del talento, el avance acelerado de la inteligencia artificial (IA), la escasez de perfiles especializados y la urgencia de replantear la cultura organizacional están redefiniendo las prioridades del área, indicó Pandapé, software de gestión del proceso de selección (ATS) de Recursos Humanos.
Al respecto, Ivonne López, Brand & Communications de Pandapé, sostuvo “Hoy, el área de Recursos Humanos no solo responde al cambio en México y el mundo: lo lidera. Las organizaciones que comprenden esto están colocando al talento al centro de sus decisiones estratégicas. Este enfoque permite anticipar escenarios complejos, construir culturas mucho más resilientes y diseñar modelos de trabajo que conecten con las nuevas expectativas del mercado laboral”.
Sobre cultura organizacional, Pandapé expuso en un comunicado que, según Gartner, el 97 por ciento de los líderes de RRHH desea transformar algún aspecto de la cultura en su organización. Sin embargo, sólo una minoría logra convertir ese deseo en acciones concretas. Una cultura mal gestionada reduce la retención, debilita la productividad y pone en riesgo la reputación interna de la empresa. En cambio, cuando la cultura se integra en comportamientos, procesos y liderazgo, se incrementa el compromiso y el rendimiento individual.
Respecto al bienestar como prioridad estratégica, casi la mitad de los trabajadores a nivel global experimenta niveles altos de estrés diario y solo el 21 por ciento siente que su empleador apoya su bienestar mental. Ante ello, las empresas que están rediseñando sus espacios y modelos de trabajo, desde la flexibilidad hasta la salud emocional, logran mejores tasas de retención y compromiso. De hecho, la inversión en programas de salud mental puede multiplicar hasta por cuatro la productividad de los equipos.
Al abordar el bienestar, Pandapé resalta que los beneficios más valorados hoy incluyen flexibilidad de horarios, tiempo personal, salud mental y oportunidades de desarrollo profesional. Las organizaciones que logran traducir estas necesidades en políticas efectivas fortalecen su marca empleadora y mejoran su capacidad de atracción.
Para plantear la IA y el talento, prevé Pandapé, la mitad de las empresas contratará más científicos de datos en los próximos 12 meses. Y 6 de cada 10 ya han iniciado planes de reskilling para preparar a su fuerza laboral. Las organizaciones que están capturando valor real no solo desarrollan algoritmos, sino que rediseñan flujos de trabajo y forman a sus líderes para guiar la transformación con propósito.
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