Las tarjetas de prestaciones representan una alternativa para que las personas no bancarizadas se incorporen poco a poco a los beneficios que ofrece el comercio electrónico, que en México alcanzó un valor de 401.3 millones de pesos en 2021, según la Asociación Mexicana de Venta Online (AMVO).

De acuerdo con la desarrolladora de soluciones financieras, Up Sí Vale, las tarjetas de prestaciones son puerta de entrada para que las empresas ayuden a sus colaboradores a acceder a mayores oportunidades de compra y más aún, representan una alternativa para reducir la brecha de inclusión financiera, donde 53 por ciento de los adultos mexicanos todavía no tienen una cuenta bancaria y 7 de cada 10 no tienen acceso a algún tipo de crédito.

La firma detalló que 4 de cada 10 de sus usuarios utilizan sus tarjetas digitales, físicas o ambas para comprar en línea; cuando se cuestionó a los otros 6 por qué, una tercera parte dijo que no sabían que podían hacerlo. Sin embargo, cuando se les dijo que pueden hacerlo, el 38 por ciento dijo que ahora que lo sabe la usará y el 33 por ciento declaró que, aunque no sabe cómo hacerlo, quiere aprender cómo.

“Hemos visto cómo se han incrementado las transacciones de ventas en línea en más de un 300 por ciento desde 2020; además, cada día más personas están optando por tarjetas digitales; este fue un concepto que nació como respuesta a la contingencia y que en tan solo un año ya creció un 7.0 por ciento”, comentó al respecto Miguel Gallo, director de Estrategia de Up Sí Vale.

Durante 2021 se realizaron más de 5 millones de transacciones online y los principales giros comerciales utilizados fueron: supermercados, ventas al detalle, misceláneas, gasolineras y marketplaces como Amazon, MercadoLibre, además de que la compra de comida a domicilio en plataformas como Rappi, Uber Eats o DiDi Food también ha representado un incremento.

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