El Sondeo de tendencias y prácticas de compensación al primer trimestre, elaborado por WTW, desvela que 54 por ciento de las empresas en México ha realizado algún tipo de acción para reducir el impacto de los incrementos en su estructura salarial, alcanzando ya el salario mínimo diario en este año un crecimiento de 248.93 pesos, lo que representa un incremento general del 20 por ciento.

De las organizaciones que han tomado alguna acción al respecto, el 50 por ciento ha realizado ajustes en la progresión de su estructura salarial, y el 41 por ciento otorgado un aumento salarial mayor para el personal técnico/profesional, con el objetivo de mantener la diferenciación con el personal operativo.

Para 2025, se prevé un incremento salarial de 5.76 por ciento en promedio para personal administrativo.

“En los últimos seis años los incrementos al salario mínimo de México han estado en el rango de 15 a 22 por ciento por año, por lo que los aumentos salariales otorgados a los empleados cuyo salario se encontraba cercano al salario mínimo fueron superiores al resto de la población, lo que ha generado una reducción en la progresión salarial con respecto a los empleados que se encuentran en puestos de niveles superiores”, destacan los especialistas de WTW.

Por sector, el que otorgó mayor porcentaje de incremento salarial para el personal Administrativo y Operativo fue el de Manufactura, con 6.64 y 11.71 por ciento, respectivamente.

En cuanto al paquete de prestaciones y beneficios, indica que, del total de las organizaciones encuestadas, el 24 por ciento planea realizar ajustes en sus prestaciones de ley:

• 21% realizará ajustes en aguinaldo
• 13% en los días de vacaciones
• 13% en el porcentaje de prima vacacional

Además de otras modificaciones en los beneficios que planean realizar las organizaciones, como la política del automóvil. Según la encuesta de WTW, a pesar de los retos en movilidad y cambios en los esquemas de trabajo a los que las organizaciones se han enfrentado en los últimos años, el 72 por ciento de éstas cuenta con una política de automóvil; el 75 por ciento con auto asignado, el 11 por ciento otorga bono para auto y el 14 por ciento tiene un esquema flexible; es decir, el colaborador puede elegir entre auto asignado y bono para auto.

El 9.0 por ciento de las empresas que cuenta con una política de bono o auto asignado planea flexibilizar la política para permitir que el empleado elija el esquema que más se adecue a sus necesidades.

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