La OIT reconoce que existe una relación entre el aumento del estrés laboral y de otras enfermedades mentales relacionadas con el trabajo y los factores ligados a las tecnologías, a la parte social y económica.
El estrés puede estar presente en los individuos de distintas maneras, desde presentarse como un estrés positivo, que nos ayude a hacer frente a los retos que se nos presentan, siendo parte importante y un motor para incrementar nuestras capacidades y la realización de las tareas, de acuerdo con la compañía enfocada a la telemedicina, 1DOC3.
Sin embargo, cuando este estrés deja de tener un papel motivante, puede convertirse en una consecuencia negativa que afecta a los individuos y puede ser perjudicial cuando no se gestiona de manera correcta.
En tal caso, señala la firma, se puede desarrollar un proceso de estrés agudo y que, en la medida en que las condiciones se mantengan poco favorables, puede complejizarse hasta representar una condición crónica que comprometa la salud de los individuos.
Debido a lo anterior, cuando el estrés provocado por el trabajo representa una afectación significativa en los colaboradores, este puede comenzar a manifestarse a través de distintas reacciones que se presentan por la incompatibilidad entre los conocimientos o experiencias de los trabajadores y las exigencias de su actividad laboral, entre estas reacciones, la OMS considera respuestas como:
En la actualidad, abundó, se presenta una sobre información de ciertos temas, se intensifica el trabajo y las conexiones entre el empleado y su trabajo, ya que, gracias a la tecnología, el empleado puede estar “siempre disponible” gracias a los dispositivos móviles y en la mayoría de los casos, el empleado considera que esta disponibilidad, es necesaria ante el riesgo de perder el empleo.
“Cuando se presenta una constante exposición al estrés de manera intensa y prolongada, en la mayoría de los casos, los trabajadores no cuentan con oportunidades para liberar dicha tensión, por lo tanto, no cuentan con el tiempo o los medios para poder recuperarse, lo que se traduce en que, de manera eventual y a mediano o largo plazo, comiencen a aparecer desórdenes a nivel mental, físico o incluso causar alteraciones o cambios al sistema inmune, lo cual genera consecuencias como la presencia de enfermedades, ausentismo o incapacidad laboral”, sostuvo la Doctora Lina Porras Santana, Directora de Salud en 1DOC3.
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