Un 49 por ciento de los trabajadores en México ha experimentado workaholism o adicción al trabajo al menos una vez en su carrera debido al estrés laboral, desvela el sondeo más reciente de OCCMundial.

Para el portal de empleo, la necesidad compulsiva de trabajar constantemente surge como mecanismo para evitar enfrentar emociones difíciles en el trabajo, como la intensa presión por el volumen de tareas o la búsqueda de validación por parte de los superiores.

En contraparte, el 20 por ciento no ha tenido adicción al trabajo, manteniendo un equilibrio saludable entre su vida personal y profesional. Este grupo mencionó su interés por mantener un alto rendimiento laboral sin que esto tenga que volverse una prioridad excesiva que intervenga en otros aspectos de su vida.

Al abordar los factores de esta adicción al trabajo, 19 por ciento de los participantes señalaron la presión de los superiores como la razón detrás del workaholism. La exigencia puede crear un entorno laboral en el que se espera que los colaboradores estén siempre disponibles y entreguen resultados inmediatos, lo que puede llevar a que se sientan con la necesidad de trabajar a costa de su tiempo personal para cumplir con las demandas de su trabajo.

Un 12 por ciento considera que los problemas emocionales como la depresión o la baja autoestima pueden contribuir al desarrollo de la adicción al trabajo. Estos problemas llevan a algunas personas a refugiarse en las actividades laborales como una forma de escape.

El sondeo de OCCMundial también refiere que 35 por ciento de los trabajadores consultados mencionó que la adicción al trabajo puede ocasionar problemas de salud mental, generando trastornos del sueño, irritabilidad y ansiedad, lo que dificulta la comunicación y convivencia con sus amigos y familiares.

El 27 por ciento ha observado que el workaholism conduce a conflictos familiares debido a la falta de control sobre el tiempo, lo que limita su disponibilidad para participar en momentos importantes y estar presentes en el hogar, descuidando así sus relaciones.

En un contexto similar, el 20 por ciento opinó que la adicción al trabajo reduce el tiempo de calidad con el círculo social y familiar.

Por último, el 18 por ciento señaló que el workaholism provoca una desconexión emocional, enfocándose únicamente en el deseo de sobresalir profesionalmente, lo que impacta negativamente en su vida personal y bienestar.

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